Es un derecho humano, reconocido a nivel constitucional, el cual impone obligaciones a las personas físicas o morales del ámbito público y privado que tratan datos personales, reconoce derechos a los titulares (dueños) de los datos, con la finalidad de garantizar su privacidad, el buen uso de la información personal y el derecho para decidir de manera libre e informada, sobre el uso de la información que les pertenece. Asimismo, reconoce el derecho de los titulares para acceder, rectificar, cancelar y oponerse al tratamiento de sus datos personales (ARCO), en los términos que las leyes específicas establezcan. En el año 2017, se promulgaron tanto la Ley General de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados, así como la Ley de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados del Estado de Durango.
Es toda aquella información relativa a una persona física, que la identificada o hace identificable. Es la información que describe, que da identidad, caracteriza y diferencia de otras personas.
Algunos datos personales son: nombre, dirección de correo electrónico, RFC, CURP, número de pasaporte, calificaciones, estado civil, cuentas bancarias, etc.
Estos datos pertenecen a diversas categorías, tales como: de identificación, laborales, académicos, patrimoniales, biométricos, sensibles, entre otros.
Son aquellos que informan sobre los aspectos más íntimos de las personas, y cuyo mal uso pueda provocar discriminaciones o ponerles en grave riesgo, como por ejemplo, el origen racial o étnico, estado de salud (pasado, presente y futuro), información genética, creencias religiosas, filosóficas y morales, opiniones políticas, preferencia sexual, entre otros. Estos datos requieren de especial protección y cuidado. En el Estado de Durango, son sujetos obligados y/o responsables del tratamiento de datos personales: